estriba en una educación basada en el acompañamiento. Sin embargo este modelo de
acompañamiento de corte estético y emotivo que genera paradojas en los docentes.
(…) mientras los paradigmas educativos apuestan hacia la construcción
del aprendizaje, el trabajo en equipo, la excelencia académica, y el
pensamiento creativo; por otro lado la sociedad aplaude los logros
individuales, el egoísmo, y la competencia descarnada. La falta de
compromiso, la desconfianza, la mutación de valores es lo cotidiano
para los jóvenes, no sólo en su educación sino en su vida personal. Y la
preocupación crece cuando en la práctica docente se observa que, en un
buen número de casos, el estudiante pasa a un segundo término y se le
da primacía al cumplimiento del programa y de los tiempos del curso,
a la obtención de puntos y escalafones, y a que la práctica docente se
percibe sólo como una actividad complementaria de la remuneración
profesional. (Aizpuru, 2008, pp. 35).
La principal paradoja es que el centro de gravedad, que son los intereses de
aprendizaje del estudiante no siempre son atendidos, pese a los esfuerzos del mecanismo
coercitivo institucional, puesto que hay reticencia del docente por ser solo un
acompañante y la figura principal que recicla los contenidos educativos sin respetar una
jerarquía epistémica: libro, artículo de revista académica, manual, sitio web oficial,
video, audio y el ordenador gráfico. (Navarro coor, 2014: 28 ss)
Debido a que esta jerarquía epistémica (libro, artículo, etc.) la han hecho
evanescente las transnacionales de la informática y del entretenimiento, el objeto digital
de acceso abierto que ha prevalecido ha sido el video, con escaso control epistémico y
más bien, sujeto a monetización de los productores asociados o individuos privados.
(Suárez, 2012: 75 ss)
La segunda paradoja es que el modelo emotivo de acompañamiento, desde sus
orígenes no estuvo pensado para estandarizar criterios de evaluación sino que más bien
presupone que la pluralidad de contenidos debía ser evaluada a partir del video o de un
sitio web oficial, desechando el artículo de revista y el libro especializado.
La segunda orientación crítico-racionalista parte del movimiento de acceso
abierto, el cual es contrahemónico pero internacional ya que lucha para que los proyectos
y publicaciones científicas financiados por el Estado estén disponibles en diferentes